Les compartimos las palabras leídas el 23 de abril en el Ciclo Latinoamericano que realizamos en la puerta de nuestra casa. Extensivas ciertamente, pero que son un poco el reflejo de lo que sentimos y es el espíritu que nos moviliza. Las acompañamos con fotografías de la jornada.
"Hablemos con alegría, salgamos a la calle a escucharnos y a darnos momentos juntos. No tengamos miedo de recuperar nuestro espacio, la puerta de nuestra casa y el encuentro con los vecinos. Vecinos todos: de al lado, enfrente, a unas cuadras y a unos barrios. Vecinos de provincias, vecinos de continente. Seamos libres de fronteras y seamos amigos en nuestra batallada, porque nos necesitamos juntos para trascender el presente y mantener vivo aquella llama que nos ha inspirado.
Ésta es una invitación, tiene fecha y hora de inicio, hoy acá estamos disfrutándola, pero es eterna. Este ciclo es un punto de partida, es un transcurso y es nuestro momento para celebrar por nuestros orígenes más profundos. El cuerpo y su lenguaje, sincero y a merced de nuestra cultura latinoamericana, nos agradecerá que ya no haya treguas ni reivindicaciones, que ésta es la realidad que queremos y alimentamos con la constante construcción de nuestra identidad. Ésto somos, entonces ésto seamos, vayamos hacia nuestro mas autóctono ser.
Miremos y escuchemos lo que vibra por las venas. La sonoridad está en el aire y la danza nos comulga unos a otros, debemos darnos ésta fiesta por el silencio mutilador de emociones con el que han desaparecido una generación y anestesiado a otros tantos.
Hoy lo que está sucediendo y lo que avanzaremos entrelazados en un mismo grito sagrado nos hace pueblo, somos nación, habitantes de un mismo continente. Llevamos en el corazón el latir de la tierra, que nos guía y nos acerca para que juntos caminemos, bailemos, cantemos y llenemos de color nuestro Buenos aires querido, ventana abierta de la misma lengua que funde la hermandad compañeros.
Por tanto cemento con el que ahogan nuestra ciudad, por los ruidos del espanto y por la sequía del temor que riegan muchos a diario, acá estamos rompiendo el muro que el amor no amerita y que el crecer como comunidad nos llama a transformar definitivamente en un motivo de cada despertar. Son tiempos de emociones, con los derechos humanos de pie y las orejas atentas a lo que pasa allá afuera. Néstor nos dijo que “la política es amor”, y a puro galope acorazonado abrió los ojos de Argentina para que nuestro cono sur no se levantara sin nosotros.
Y vengan ustedes con sus sentimientos, bienvenidos con sus propias razones para festejar! Nosotros los esperamos con ganas de fortalecer el augurio que los carnavales pasados nos dejaron y con el ferviente deseo de darle a nuestro querido barrio, Boedo, la oportunidad de gozar en sus calles, empedrado y artesanía mediante, el legado de los maestros latinoamericanos y las enseñanzas de los pueblos originarios.
La cultura es la llave, y en nuestro continente ese tesoro de músicas, colores, comidas y filosofía erosionan de la mano de los que defendemos en libertad, la memoria y la verdad, por medio de la unidad de las culturas y la participación ciudadana.
Escuchamos a muchos hablar de orden como si nuestra ciudad y país fueran una habitación con ropa tirada, y en contrapartida tenemos a una madre leona que cuida y defiende hasta el más íntimo detalle de nuestra nación, empezando por cada necesidad del pueblo y aun desplazando sus propias necesidades humanas.
Y ese es el camino: cuidarnos, defendernos y unirnos en nuestras diferencias para crecer. Salgamos a romper mitos: basta de tenerle miedo al crecer, basta de pensar que la política es cosa de grandes o de ladrones o de mentirosos, política es cada acto que realizamos y cada palabra que hasta no pronunciamos. Hay toda una maquinaria que se esmera en hacernos creer que los 90’s están vigentes, y no es así.
Entonces necesitamos participar, y los necesitamos a todos, nuestras puertas están abiertas para recibirlos con sus inquietudes y sus voluntades, para también contarles las nuestras. Para lograr esto tenemos que conocernos, porque el conocimiento nos da la libertad de construir, y por eso compañeros y vecinos, son tan importantes nuestras actividades juntos.
Por primera vez sabemos que es posible, tenemos en claro que queremos y que situaciones ya no queremos volver a ver en nuestro país... estemos juntos para profundizar y hacer llegar el legado de Néstor, y el incesante hacer de nuestra Presidenta a cada habitante de éste suelo.
Estamos conmovidos por lo que está sucediendo, cada vez somos más los que decidimos elevar la voz para defender el proyecto nacional y popular. Mientras nuestra ciudad se rige por una política mediocre, de desprecio y especulación, de afán golpista y privatizador hasta del mismísimo aire si se lo pudiera hacer, nuestra nación está cada vez más fuerte y las provincias que ya comenzaron con sus elecciones hablan por el mejor de los diálogos que puede existir en democracia: el derecho a votar.
Nosotros desde cada uno de nuestros lugares, sigamos curando ésta Buenos Aires herida y maltratada por el PRO, el PJ Disidente, sus cómplices mediáticos, económicos y religiosos, que pronto tendremos la oportunidad de ponerla de pie junto a lo que sucede en el resto del país, de la mano de nuestra máxima compañera, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, con la generosidad que ella nos brinda al permitirnos ser parte de éste momento histórico.
Para algún ignorante de la calaña de Mauricio Macri, es el peor momento de la democracia, para la mayoría benditamente, es un renacimiento de nuestra patria hermanada en el continente del Sur.
La mayor asignación universal que estamos viviendo, es la que comenzó con Néstor allá por el 2003, cuando decidieron poner en marcha éste proyecto que nos da a cada ciudadano un lugar imprescindible de participación y de goce de nuestra identidad. Nos han devuelto el contenido del “ser ciudadano”, y es un deber no volver a negociarlo, por eso reencontrémonos con quienes somos, porque tenemos un continente tan rico que no es posible no amarlo, y donde hay amor compañeros, hay una comunidad libre que trasciende sin muros por medio de la cultura, fiel testigo de los momentos de la historia, de esos que cuentan unos pocos y que hace grande a los otros. Y hoy somos eso mismo nosotros: testigos de un momento soñado, todos, los que se dan cuenta y los que eligen no ver.
El General dijo "gobernar es fácil, lo difícil es conducir..." y nuestra Presidenta gobierna para todos y nos conduce para que la evolución del país, sea la revolución ganada y propia de cada uno, pero nos enseña que se lleva adelante juntos.
Por eso compañeros, no nos privemos de vivir ésto, y nosotros desde acá, queremos compartirles y sumarlos a nuestra propia revolución, la cultural para que nunca, pero nunca mas, tengamos que volver a batallar con políticas de colonización por nosotros mismos y por aquellos a los que se les arranco la vida por defensa de nuestra patria."
